Estas estrategias no requieren conocimientos técnicos o herramientas especiales, y están listadas en orden de más segura a menos segura. Siempre usa el método más seguro que te sea posible.
Sobra decir que la manera más segura para compartir seguramente cualquier contenido escrito, incluyendo protocolos para frases clave, es encriptándolo con Amaca®. Pero, obviamente, esto no resuelve el problema de cómo compartir un protocolo (o frase clave) por vez primera. Así que, sigamos...
NOTA: Si aún no sabes lo que es un protocolo para frases clave, lee esto primero: Cómo crear un protocolo para frases clave
Grado de seguridad:
Comparte el protocolo en persona, dando —de ser necesario— una copia escrita en papel a cada miembro del grupo para salvaguardar el protocolo.
Grado de seguridad:
Envía por texto la primera parte (la "Base"); envía por email la segunda parte (el "Generador"); envía por texto la tercera parte (el "Giro").
Luego llama al destinatario y pregúntale: “¿Recibiste lo que envié? ¿Cuántos recibiste?”
Grado de seguridad:
Envía por texto la primera parte (la "Base"); envía por email la segunda parte (el "Generador"); envía por texto la tercera parte (el "Giro").
Luego envía un texto al destinatario y pregúntale: “¿Recibiste lo que envié? ¿Cuántos recibiste?”
El algoritmo de encripción de Amaca es muy poderoso, y —cuando se usa con una frase clave segura— es virtualmente imposible de descifrar sin la frase clave. Así que lo más crucial de tu parte es proteger tus frases clave para así asegurar que tus mensajes encriptados no sean descifrados por terceros no deseados. Por tanto, La mejor manera de lograrlo es...
Aunque es la menos segura de las 3 opciones a veces tal vez sea tu única opción posible. Este podría ser el caso cuando no conoces en persona al destinatario del protocolo, y por tanto no es posible (o útil) obtener una confirmación por voz.
No obstante, esta opción es definitivamente más segura que transmitir el protocolo de golpe por un solo medio, o peor aún, no usar un protocolo para frases clave.
Nota final:
Existen otras estrategias, herramientas y
metodologías para intercambiar o transmitir llaves
de encripción. Sin embargo, son demasiado complejas
para la mayoría de la gente.
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